2.- Analítica
En esta etapa, el cliente y el equipo de outsourcing determinan los objetivos a alcanzar durante el desarrollo, fijan las tareas del negocio, los requerimientos del usuario, etc. Este proceso se desarrolla en formato de diálogo, aquí es importante la participación de ambas partes. A veces, el cliente puede desconocer algunos de los matices del desarrollo de productos y esto se descubre en el proceso de recopilación de información.
La tarea del analista es anticipar todos los posibles riesgos y proponer opciones para optimizar el proceso de desarrollo. Cuantos más detalles anuncie el cliente, con mayor precisión se redactará la tarea técnica y, en consecuencia, mejor será el resultado final.
3.- Evaluación de proyecto
Los datos recopilados se analizan y en base a ellos se crea un modelo de producto, que es igualmente comprensible tanto para el cliente como para el desarrollador. A continuación, se calculan los costos preliminares de tiempo y mano de obra necesarios para crear el producto. La mejor opción es una presentación que describa en detalle la evaluación del proyecto, los posibles riesgos, el equipo para trabajar, varias opciones para implementar tareas, condiciones, etapas y otros detalles.
4.- Diseño
Una vez resueltas todas las cuestiones de la evaluación preliminar, comienza la etapa de diseño, que incluye las siguientes sub-etapas: desarrollo de un mapa del proyecto que indique puntos de referencia para verificar los resultados; diseño de arquitectura de software; selección de tecnología: herramientas de desarrollo que incluyen lenguajes de programación, marcos, sistemas de gestión de bases de datos, compiladores, etc.
5.- Desarrollo
Esta etapa implica la implementación de las ideas del cliente ya elaboradas en pasos prácticos. El formato ideal es el desarrollo de sprints. El equipo de outsourcing realiza el trabajo de acuerdo con el mapa del proyecto y muestra al cliente el resultado de cada parte. El desarrollo en formato sprint es conveniente y eficiente porque le permite recopilar comentarios lo más rápido posible, reaccionar a los cambios y realizar modificaciones. Este enfoque se basa en una metodología ágil y se denomina iterativo.
6.- Pruebas
Probar un producto de software es una de las etapas más importantes en el proceso de desarrollo, porque antes de la presentación de un nuevo producto a los consumidores, la empresa debe estar 100% segura de su desempeño. Por lo tanto, es muy importante identificar oportunamente los errores críticos, verificar la funcionalidad del producto, realizar un análisis completo e implementar recomendaciones de mejora. Para hacer esto, los ingenieros de control de calidad pueden utilizar varios métodos para probar un producto de TI: modular, de integración, funcional, de aceptación.
7.- Lanzamiento
Una vez que se hayan completado las pruebas y se hayan corregido los errores, se lanzará el producto terminado. En esta etapa, también se configuran herramientas de control para ayudar a estudiar el comportamiento del usuario y modificar el producto, si es necesario.
8.- Cesión de derechos
Las condiciones detalladas para la transferencia de derechos se prescriben en el acuerdo de cooperación entre el cliente y la empresa de desarrollo.
9.- Soporte Técnico
Una vez finalizado el trabajo, el producto suele necesitar más asistencia técnica. En esta etapa, el desarrollador ofrece soporte temporal o permanente para reducir los riesgos de fallas después de lanzar un nuevo sistema y asegurar una rápida recuperación en caso de problemas. El servicio temporal implica la eliminación de posibles deficiencias durante un período limitado. El soporte técnico constante es conveniente si necesita recibir regularmente las últimas actualizaciones de software.
10.- Conclusión
Trabajar con un equipo de desarrollo subcontratado debe ser conveniente y eficiente, por lo que la elección de un socio de TI debe abordarse de manera responsable. Incluso en la etapa de preventa, puede determinar cuánto le conviene el desarrollador, si se preocupa por el cliente, qué tan competentes son los especialistas del contratista, qué tan rápido el contratista reacciona a sus deseos y qué intereses son prioritarios para él: su negocio o el suyo propio.